
¿QUÉ ASPECTOS SOLEMOS TRABAJAR?
Cada caso es único, sin embargo, los temas que con más frecuencia solemos trabajar en las sesiones de acompañamiento son:
Si sientes que tu caso no se relaciona directamente con alguno de estos temas, no te preocupes, luego de conversar, es seguro que logremos descubrir lo que necesitas.
Falta de intuición
Es la disminución de la capacidad para percibir o comprender información que nos llega de manera intuitiva, sin apelar al razonamiento lógico o análisis detallado. La intuición implica una comprensión instantánea o un conocimiento interior que no siempre se puede explicar con la lógica.
Cuando experimentamos una falta de intuición, podemos tener dificultades para confiar en nuestros instintos, y para tomar decisiones basadas en corazonadas o captar sutilezas sin un análisis profundo.
Esto no quiere decir que las decisiones deban ser tomadas sin apelar a la lógica. Necesitamos la mente para deconstruir nuestras ideas condicionadas de lo que es correcto o incorrecto para permitir que la intuición nos guíe, luego necesitamos recopilar información sobre la situación, luego notar nuestra inclinación o tendencia hacia un comportamiento y corregirlo, para así asimilar apropiadamente la información que tenemos. Luego permanecemos en silencio y tomamos acción siguiendo nuestra intuición.
Por ejemplo, llevas rato sentado trabajando y sientes que no estás fluyendo, que estás “bloqueado”, de pronto, sientes ganas de pararte y salir a caminar y tomar aire fresco. Piensas, “tengo que terminar esto, salir a caminar no es productivo.” Observas que ya llevas horas trabajando, que no terminas de avanzar y que tu tendencia es quedarte “siendo productivo”. Cierras lo ojos, respiras lento y te permites nuevamente sentir el impulso a salir a caminar, sales por algunos minutos y luego vuelves cabeza fresca. Falta de intuición sería insistir en que no es una buena idea y quedarte.